¿Las mujeres gordas tienen la vagina más grande y las delgadas más pequeña?

  El tamaño de la vagina y sus características varían de mujer a mujer, sin importar el peso corporal, así como el tamaño y características del pene varían de hombre a hombre. La vagina de la mujer, es un órgano más del cuerpo, como lo es el corazón, los pulmones o la nariz, y si  tiene alguna clasificación de tamaño, no es por las veces que haya tenido experiencias, sino más bien, por la propia constitución de la mujer. Lo único que si influye algo, es el hecho de haber tenido partos naturales, y más que otra cosa, porque con frecuencia, los médicos "cortan" (amplían) la vagina para que el bebé nazca sin problemas y no se asfixie, y aunque vuelven a coser de nuevo, a veces el cuerpo no asimila bien esta operación y queda un poco más grande de lo normal.

 Además hay que tener en cuenta que según la posición sexual que se emplee, hay cambios en la percepción. Esta creencia de que a mayor peso corporal, mayor será el tamaño de la vagina es una idea esencialmente errónea, incluso para algunos es todo lo contrario, y sostienen que las chicas gordas tienen la vagina más estrecha, lo cual tampoco es cierto; el tamaño de la vagina y sus características varían de mujer a mujer, sin importar el peso corporal. 

  Algunos hombres refieren que es más difícil penetrar a una chica más corpulenta, debido obviamente al peso de la chica, o que se les dificulta encontrar la vagina debido a la abundancia de peso, o que solo se pueden practicar unas pocas posiciones con mujeres con sobrepeso. Por supuesto que es más difícil poder penetrar cuando la chica es más voluminosa, pero fundamentalmente se debe a que no se emplea una posición adecuada. Hay que tener en cuenta que posiciones son las más beneficiosas para ambos y en cuales podemos alcanzar más placer. Posiciones como el perrito, la cuchara, la sorpresa, o la somnolienta, entre otras, son las más recomendadas por los sexólogos para mujeres con sobrepeso.

  Las chicas delgadas obviamente son más atléticas y maleables, y como tienen un área corporal menor, es mayor el rango de posiciones que se pueden practicar. Pero, el peso corporal NO influye en el tamaño de los genitales, como tampoco influye en la capacidad de sentir y dar placer. 

  Curiosamente, puedes encontrar más mujeres gorditas con vagina pequeña, que mujeres delgadas y altas, esto no está científicamente comprobado, simplemente se basa en observaciones y experiencias citadas por algunos hombres. 

  No obstante, el interior también cuenta, por ende las chicas más en forma, fit o musculosas tienen más desarrollados los músculos interiores, por lo que darán más placer cuando ellas lleguen al orgasmo, igualmente existen ejercicios para fortalecer los músculos vaginales, como son los ejercicios de Kegel.

  Ahora bien, muchas veces se habla de vaginas angostas o anchas, pequeñas o grandes, profundas o más cortas, pero, ¿Hay medidas estándar? La vagina es un conducto músculo membranoso de unos 12 centímetros de longitud y 3 de ancho. Normalmente está plegado, apoyando la cara anterior sobre la posterior, lo que origina un orificio virtual que se abre y distiende durante el coito. Sin estar relacionado con el peso corporal en sí mismo, si la pelvis es amplia y grande podría ser que la vagina sea más larga. Hay situaciones particulares donde puede haber una malformación congénita que determine que la vagina sea corta, o pueda tener tabiques internos que dificulten la penetración, pero esas son patologías que han de ser tratadas por especialistas. Las diferencias de tamaño interno tienen que ver, por lo general, con la capacidad de distensión y la longitud. Un ginecólogo puede llegar a tener una medida aproximada mediante la realización de un tacto vaginal.

  Durante el sexo, la vagina es capaz de adaptarse al tamaño del pene: puede ampliarse o retraerse. En definitiva, lo “abraza”. Por lo tanto, se podría decir que no existen vaginas grandes o pequeñas, sino adaptables. La vagina es una cavidad virtual, con paredes muy elásticas y con mucha capacidad para distenderse durante la excitación y el orgasmo.

  Al tener relaciones no hay ningún problema relacionado con el tamaño, siempre que se trate de una vagina normal, sin malformaciones congénitas. Sí puede haber dificultades (como dolor o vaginismo) si hay poca elasticidad o tensión en los músculos perineales, y obviamente si hay poca lubricación.

  Y para finalizar, se habla mucho de que el tamaño de la vagina cambia con el paso del tiempo. En realidad lo que puede modificarse con los años es precisamente su elasticidad, como ocurre con cualquier otro tejido del cuerpo, sea la piel, el cabello, los músculos o las articulaciones. En esos casos, las cirugías estéticas vaginales se presentan como la solución para “rejuvenecer” la zona. Sin embargo, muchos especialistas aseguran que salvo que exista una dificultad anatómica congénita o un deseo de cambio de genitales, no es recomendable ningún tipo de cirugía estética  de la vulva. Los tejidos vulvares tienen muchos receptores sensitivos que liberan feromonas y tejido eréctil que favorece la excitación y la respuesta orgásmica, y estos pueden verse afectados tras la cirugía.